Y el libro de referencia para todos los amantes de té, “El libro del Té” de Okakura Kakuzo. Veronica nos ofrece un encuentro para trabajar la apreciación de lo que no se ve alrededor de una taza de té. En occidente pensamos en y con luz , y lo hacemos además visualmente. Y nos propone recorrer un pequeño camino desde la sombra a la luz, poniendo atención no tanto en lo visual, sino en las sensaciones, en lo inmaterial.
“En toda casa de té japonesa reza una frase que llevo en el alma “ichi-go, ichi-e”, (un encuentro, una oportunidad / un encuentro, solo una vez), expresión que nos habla de lo transitorio, lo fugaz y lo que hace único ese momento. Tanto para las cosas y como para nosotros mismos; volveremos a vivir un momento dos veces, porque nunca será igual, nosotros no seremos los mismos”