“La gratitud, como ciertas flores, no se da en la altura, y mejor reverdece en la tierra buena de los humildes.”
— José Martí
El agradecimiento empieza quizá cuando podemos ver a los demás. Sin mirada es difícil que haya gratitud. Y la gratitud tiene muchos lenguajes. Os proponemos aquí un gesto pequeño para agradecer y celebrar a aquellas mujeres que forman parte de nuestras vidas.
ALEJANDRA G. REMÓN
Letras, Fotografía, Collage & Más
Una de las primeras personas que nos visitó en el taller de Tetuán cuando nos mudamos el año pasado fue Alejandra Remón. Ella siempre viene con algo. Esa vez lo hizo con dos obras suyas delicadísimas enmarcadas de manera muy elegante. En aquel momento solo teníamos dos sillas en el taller y una mesa improvisada con un tablero y unas borriquetas. Estábamos emocionadas por “nuestra habitación propia”, pero a la vez abrumadas por el vértigo del cambio, y el mucho-trabajo a la vista. Ella lo sabía y quiso llenar ese espacio un poco “huérfano” con un gesto amigo que llena más que cualquier cosa.
Más allá de lo que se ve, una amiga te ve, y te acompaña.
Sentirse visto es algo muy potente.
Agradecerlo también lo es.
Nosotras sentimos un gran respeto por el trabajo de Alejandra, y agradecimiento por su amistad. Y este año queremos poner en valor el agradecimiento con una interpretación de la tradición italiana de regalarse mimosas entre mujeres el 8 de Marzo.
MIMOSA
Más allá de la Acacia Dealbata
La mimosa es una especie fuerte, casi indestructible, capaz de prosperar en la tierra quemada y de resurgir en el lugar mas devastado. Es por esta naturaleza tan resistente por la que se le atribuyen desde muy antiguo propiedades mágicas, tanto como escudo protector ante los problemas, como en calidad de agente para romper hechizos y maldiciones.
Toda la simbología alrededor de esta especie arbórea, es de carácter protector, alentador y mágico.
Es posible que estas fueran algunas de las razones por las que, en 1946, después de que terminase la guerra, tres mujeres italianas (las políticas Teresa Noce, Rita Montagnana y Teresa Mattei) escogieron lucir como bandera en el día de la mujer un pequeño ramillete de flor mimosa en su solapa.
Su objetivo no era otro que celebrar la fuerza y el coraje de sus compañeras y amigas, ensalzando así su valentía, su compromiso y su solidaridad con el resto de las mujeres y celebrando con júbilo y entusiasmo la admiración que sentían hacia cada una de ellas.
Desde entonces, las ilusiones, el amor y la esperanza se tiñen de amarillo en Italia cada 8 de marzo, una tradición que ahora hemos decidido recoger nosotras para compartir contigo esa maravillosa experiencia, ofreciéndote la oportunidad de regalar una mimosa a cada una de esas grandes mujeres que forman parte de tu vida, como símbolo de amor, fraternidad, admiración y cariño.
Este año, hemos trabajado en dos propuestas que esperamos que os gusten y puedan ser un símbolo de agradecimiento para sus destinatarias:
– Un set de laminas de Mimosa acompañado de unas cartas
– Un collage en papel de algodón creado por Alejandra y enmarcado artesanalmente entre cristales y encintado manual en negro.
MIMOSA
Set de correspondencia
– 3 láminas botánicas A5 con un collage de mimosa prensada por el taller y papel antiguo. En papel de algodón hecho a mano. Cada lámina es única , como la persona que la recibirá.
– 3 cartas de agradecimiento en papel premium para acompañar a las láminas, escritas por Alejandra Remón.
– 3 láminas en papel translucido vegetal con la simbología de la mimosa y la historia de la tradición italiana.
– 3 sobres en color acacia para que puedas enviar este tributo a las mujeres que decidas.
– En una caja amarillo ocre de gran calidad, fabricada en un taller de Madrid.
OBRA
Collage Mimosa sobre papel antiguo
– Collage realizado por Alejandra Remón de mimosa prensada por el taller sobre papel de página de libro antiguo en papel de algodón hecho a mano.
– Enmarcado artesanal entre cristales y encintado en color negro.
– Tamaño 21 x 30 cm.
– Serie de 10 unidades.
Recibir una carta, encontrarte un sobre en la mesa del desayuno , o del trabajo…un gesto de agradecimiento sincero, de hermandad que nos empuja y nos sujeta.
A tu madre, a tu hermana, a tu amiga, a tu jefa, a tu vecina, a quién te cuida, a aquellas mujeres tengas que celebrar en tu vida. También a ti misma.
Gracias a ti también que estás leyendo esto.